Para muchos, el mes de diciembre trae alegría y festividades. Las fiestas navideñas son un buen momento para pasar tiempo de calidad con tus parientes y ponerte al día con las vidas de las personas que te rodean. Pero si ya dejaste la comodidad del nido de tus padres, o como ellos dirían “te mandas solo”, entonces sabés que estar en casa durante las vacaciones no parecerá un especial navideño, sino a una telenovela melodramática donde se revelaran secretos, se desenredan pleitos y tu mamá se la pasa rezando por tu bienestar y seguridad.
Bueno, este extremo no siempre es el caso, pero entendemos que puede ser difícil regresar a casa y convivir con gente que no ha abandonado hábitos tóxicos desarrollados a lo largo de la vida. Y así como las estaciones cambian, tu también ahora te afirmás completamente diferente: segurx de si mismo, independiente y más importante como adulto. Aunque en los ojos de tus padres siempre seguirás siendo un bebé, esto no debería hacer desvanecer el trabajo que has puesto en ti mismo. Reviviendo tu infancia no debería traerte ansiedad sino al revés felicidad. Dado que muchos de ustedes compartirán espacio con las personas que los criaron, vamos a resumir algunas cosas que definitivamente escucharás durante las fiestas navideñas y maneras de lidiar con el estrés que conlleva estar en casa durante las vacaciones.
¡Háganos saber si puede relacionar!
- Llegando a casa al recibir una cálida bienvenida, después de abrazarte los primeros comentarios que escucharas serán sobre tu complexión. No importa si su estilo no a cambiado desde el 2010, su familia tendrá algo que decir. Si no es sobre su peso, será la forma en que te vistes o maquillás y lo más probable es que suene así:
“Hay Mijx, lla estas bien grande, ¿engordaste? Esta bien te vez mejor.”
Incluso si lo dicen de buen humor, debemos reconocer las connotaciones negativas que conllevan sus palabras. Los cuerpos sanos vienen en todas formas y tamaños, no temas anunciar que los comentarios sobre tu cuerpo están prohibidos. No es ser grosero establecer límites personales, al final, es mejor levantar la voz que desarrollar un complejo.
- Y sin duda, después te preguntarán si tienes hambre (bueno, al menos tu mamá lo hará).
“¿Ya comiste?”
Y sin esperar una respuesta te estará preparando un plato. Como latinxs, nuestra
relación con la comida es muy complicada. La comida es una herramienta para mostrar afecto, por lo tanto, aceptar o rechazar la comida se convierte en una batalla. La comida no debe dictar las relaciones que tienes con tu familia. Escucha a tu cuerpo, si estás lleno está bien decir “no mas” y viceversa si gustás comer mas no dejes que ‘la dieta’ te detenga. La comida está ahí para alimentar tu cuerpo, tú y nadie más decide cómo hacerlo.
- Y tal como lo habías anticipado, con cada bocado que tomas vienen las preguntas intimas.
“¿Como te mantienes? ¿Con quien vives? ¿Tienes pareja?”
Ahora esto no es un problema si su familia apoya sus elecciones de estilo de vida. Pero si comienzan a ignorar tus preferencias y descartan tus respuestas, o peor, se avergüenzan de sus decisiones, está bien no compartir quién eres, pero no te dejes invisibilizar. Si no pueden aceptar a la persona que has florecido, entonces tal vez no merecen escuchar sobre tus logros.
…y si eso no fuera suficiente, espera hasta que tengas que revivir el proceso con tus tías y todxs los demás que tengan la misma curiosidad por lo que has estado haciendo los últimos años. Puedes escuchar el eco de tus tías preguntándote “tienes novio?”, en el que respetuosamente les harás saber que tu identidad no está definida por un hombre o una mujer, sino por los méritos de tu vida.
- Y cuando se acerque la navidad, olvidate de tener tiempo personal.
¿Oirás “Lla estas listx?” por todos lados.
Sin preocuparse por su tiempo, su familia esperará que usted esté en todas partes con ellos. No lo hacen intencionalmente, pero debes mantener límites firmes. Tu tiempo es importante y ellos deben reconocerlo. No viajaste desde lejos no mas para hacer mandados.
- Y no olvidemos a la hora de la cena la ayuda forzada que se les exige a las mujerxs:
“Ven a ayudar a poner la mesa”
No estamos diciendo que no ayudes, pero si las mujerex son las únicas preparando la cena, es hora de vocalizar que los estereotipos de genero deben ser eliminados. El hecho de que la cultura machista siga viva no significa que tengas que participar en ella. Estamos en 2020, no debería haber oposición.
- Y a la hora de brindar, si te exigen que le “des el abazado navideno” a todxs,
…no mas recuerda que el consentimiento es todo, y si no proviene de usted, entonces no es consentimiento. Su familia debe respetar sus límites y autonomía sobre su cuerpo. Si te sientes incómodo, está completamente bien dejar una fiesta. Su cuerpo no miente, escúchelo.
- Y cuando por fin, las festividades finalmente comienzan a terminar y queires ir a visitar a tus amistades, al momento de escaparte escucharas:
“Vas a salir? A quien le pediste permiso”
¡Eres adulto! Tu familia no debería estar vigilando tu tiempo. Cortésmente recuérdales que eres responsable y capaz de tomar tus propias decisiones (esto no debería ser una gran sorpresa).
- Pero por supuesto antes de dejarte salir escucharas:
“Cúbrete o te resfriarás”
Un mito que simplemente no es real. Libera tu cuerpo, ponte lo que quieras.
- Incluso el mejor invitado se convierte en una carga. Por eso antes de terminar tu visita siempre oirías:
“Todo el día estado aquí y los trates ahí esperándote.”
El descanso para tus padres no existe y no sabemos cómo convencerlos de lo contrario. Nuestro consejo, toca tus canciones favoritas y haz lo mejor de la situación.
- Pero al final después de sobrevivir todo siempre escucharas:
“Te quiero mucho.”
Y con esas simples palabras recordaras por qué viniste a visitar.